foto: peter callensen
Si.. B (bodas) B (Bautizos) y C (Comuniones)
Buenos días queridos amigos… como ya sabéis es la puta época de los calçots… oh my good… no para de haber calçots por todas partes… es como una epidemia.
Bien, aprovechando esta maravillosa cámara de video que tengo, mi obsesión momentánea por convertirme en director de cine, mi curso de producción de cortos y mi montón de tiempo libre –que soy ya como un prejubilado a quien nadie quiere darle trabajo, solamente las grandes compañías de seguros y banca donde para poder trabajar con ellos debes hacerte autónomo y así si y te vas a la mierda… te vas yourself- he decidido asistir a un Evento Calçotada organizado por un amigo. Él es el presi de una asociación de discapacitados con mucha, muchísima autonomía.
Además de todo… yo lo reconociendo, primero porque (al memos en mi caso) era un sector completamente desconocido, hacen prácticamente lo mismo que nosotros, les gusta cosas parecidas, sienten la música, hablan y opinan, se divierten, ríen, beben, comen, se interesan por cosas ajenas a ellos, van a la pelu, se compran ropa…. Y además… fuman chicos… Son muy …. eh…. Normales, si normales… tal cual.
Bien, tampoco nunca había asistido a una calçotada con todas las palabras de la ley… llamarme antiguo, obsoleto o simplemente…. Fino.
Oh dios mio… primero tienes que ponerte un gigante babero con el nombre del restaurante (eso ya me cambió la cara, porque llevaba una camiseta monísima en la que trozos de toalla vieja representaban una flor ). Sirven estas cebollas a la brasa en una teja (teja de tejados).
Y… aquí empieza todo:
Tienes que coger el vegetal este con las manos, pelarlo con ellas, untarlo en una salsa buenísima y comértelo como si de DIANA, la jefa mala malísima de la serie V, es tuviera comiendo una rata.
No… el calçots Word no es para mi… toda la mesa con olor a cebolla, todo lleno de ceniza proveniente de los calçots y esa montaña de restos de vegetal quemados durante horas delante de ti… No no no.
Para colmo, los platos del restaurante eran de postre… cuando lo vi y me di cuenta de cómo debía actuar… casi me desmayo… EL RESTO DEL CALÇOT NO CABIA EN EL PUTO MINÚSCULO PLATO DE POSTRE DE DELANTE MIO NI EN CUALQUIERA DE DELANTE DE LOS ASISTENTES…. Podéis imaginar esta visión desde un plano picado (o desde el techo) en donde montones de hojas salen del plato ensuciando así el mantel alrededor de éste y en el mismo trozo de la mesa que debes seguir comiendo?
Pero esto tiene tanto éxito? La gente se pone mona para ir a un restaurante así? Y ese olor ah…..
Amigos… yo habré sacado mierda de cerdo a paladas en mi juventud, habré comido alguna cosa que otra por donde normalmente salen cosas no muy agradables, habré recogido mierda de perro con una bolsa (eso si, doble), he tomado drogas por la tocha, fumo y hasta seguramente y sin saber usaré algún producto con el que para experimentar matan pequeños animales indefensos… pero … solo pensar en los calçots me da un patatús.
Critico social
BBC
Vilafranca o Vilanova de no se que (algo asi)
Buenos días queridos amigos… como ya sabéis es la puta época de los calçots… oh my good… no para de haber calçots por todas partes… es como una epidemia.
Bien, aprovechando esta maravillosa cámara de video que tengo, mi obsesión momentánea por convertirme en director de cine, mi curso de producción de cortos y mi montón de tiempo libre –que soy ya como un prejubilado a quien nadie quiere darle trabajo, solamente las grandes compañías de seguros y banca donde para poder trabajar con ellos debes hacerte autónomo y así si y te vas a la mierda… te vas yourself- he decidido asistir a un Evento Calçotada organizado por un amigo. Él es el presi de una asociación de discapacitados con mucha, muchísima autonomía.
Además de todo… yo lo reconociendo, primero porque (al memos en mi caso) era un sector completamente desconocido, hacen prácticamente lo mismo que nosotros, les gusta cosas parecidas, sienten la música, hablan y opinan, se divierten, ríen, beben, comen, se interesan por cosas ajenas a ellos, van a la pelu, se compran ropa…. Y además… fuman chicos… Son muy …. eh…. Normales, si normales… tal cual.
Bien, tampoco nunca había asistido a una calçotada con todas las palabras de la ley… llamarme antiguo, obsoleto o simplemente…. Fino.
Oh dios mio… primero tienes que ponerte un gigante babero con el nombre del restaurante (eso ya me cambió la cara, porque llevaba una camiseta monísima en la que trozos de toalla vieja representaban una flor ). Sirven estas cebollas a la brasa en una teja (teja de tejados).
Y… aquí empieza todo:
Tienes que coger el vegetal este con las manos, pelarlo con ellas, untarlo en una salsa buenísima y comértelo como si de DIANA, la jefa mala malísima de la serie V, es tuviera comiendo una rata.
No… el calçots Word no es para mi… toda la mesa con olor a cebolla, todo lleno de ceniza proveniente de los calçots y esa montaña de restos de vegetal quemados durante horas delante de ti… No no no.
Para colmo, los platos del restaurante eran de postre… cuando lo vi y me di cuenta de cómo debía actuar… casi me desmayo… EL RESTO DEL CALÇOT NO CABIA EN EL PUTO MINÚSCULO PLATO DE POSTRE DE DELANTE MIO NI EN CUALQUIERA DE DELANTE DE LOS ASISTENTES…. Podéis imaginar esta visión desde un plano picado (o desde el techo) en donde montones de hojas salen del plato ensuciando así el mantel alrededor de éste y en el mismo trozo de la mesa que debes seguir comiendo?
Pero esto tiene tanto éxito? La gente se pone mona para ir a un restaurante así? Y ese olor ah…..
Amigos… yo habré sacado mierda de cerdo a paladas en mi juventud, habré comido alguna cosa que otra por donde normalmente salen cosas no muy agradables, habré recogido mierda de perro con una bolsa (eso si, doble), he tomado drogas por la tocha, fumo y hasta seguramente y sin saber usaré algún producto con el que para experimentar matan pequeños animales indefensos… pero … solo pensar en los calçots me da un patatús.
Critico social
BBC
Vilafranca o Vilanova de no se que (algo asi)
No hay comentarios:
Publicar un comentario